Es difícil asimilar que las nuevas tecnologías van invadiendo poco a poco nuestras vidas. ¿Quién no tiene ya una dirección de correo? o siendo más concreto, ¿un teléfono móvil cuatribanda, con chorrocientas canciones mp3 y gps con antena incluída? (sólo me viene a la cabeza una persona, pero a ese en concreto hay que, como dirían los viejos de mi pueblo, "echarle de comer aparte"). Era difícil entonces, continuando la moda bloguera existente, no apuntarse al carro de la "plumilla internauta", de contar aquello que sucede, ya sea un desencuentro amoroso o una simple mirada con una persona que te cambia la vida. ¿Qué mejor manera de expresar lo que uno siente que expandirlo a los cuatro vientos? Pues ese es mi objetivo y espero, como tantas cosas que pululan por mi mente, cumplirlo a pesar de que a más de un@ le siente mal.
Y tú ávido lector bloguero te preguntarás ¿por qué cojones este tío me invita a su blog para leer esto?. Pues sí querido Watson, no podía comenzar mi andadura en este desconocido (en el sentido práctico) mundo cibernético sin antes lanzar al vuelo un canto contradictorio a la amalgama tecnológica que cada día nos va comiendo terreno y que a la vez (en mi caso) me hace tan feliz. Sí, has oido bien. Me gusta la informática y dando un simple paseo por mi cuarto comprenderás a lo que me refiero (la palabra 'friki' no está contemplada eh).
Por esta razón, koy querid@ amig@, comienza una historia. Se inicia la andadura de un loco de la colina que tiene mucho que contar; muchas aventuras que desgranar; muchas sensaciones que hilvanar; en definitiva, una vida que narrar... ¿Estarás dispuesto a seguirme en el camino? o por el contrario ¿huirás sin mirar hacia atrás? Sea lo que fuere, aquí está mi espacio: 'El rincón de NoR'.
Bienvenido a bordo compañer@ de viaje
