Mientras dirimo qué hacer para conseguir conciliar el sueño se me pasan por la cabeza infinidad de deseos. Curiosamente el 99% tienen que ver con mi Lola. Es sorprendente como te cambia la vida en el momento en que se entrelaza con otra que necesita de ti para avanzar y seguir creciendo. Ahora todo lo que quiero es para ella. Mis tiempos de de cambiar de PC cada dos meses y de smartphone cada uno han pasado a la historia. Curiosa (y necesaria) metamorfosis.
Prosigo. Se acabó mi momento de relajación. Toca tirar de la cisterna y susurrarle a la almohada. Lo conseguiré.
Buenas noches
No hay comentarios:
Publicar un comentario