No me había dado un golpe ni tenía moratones. Pero esta mañana el cuerpo me dolía a rabiar. No podía levantarme de la cama (y no es porque tuviera sueño, que también) y mis alaridos han debido de escucharse en mi pueblo natal, Alhama (a 40 kilómetros de La Envía). Han llegado las inesperadas y malditas agujetas. Ayer era el primer día de la nueva era en la que gimnasio y dieta van de la mano y ya comienzo a sufrir las primeras consecuencias de tan drástico cambio. Toca luchar contra la grasa y, como viene siendo ya tónica habitual en mis otros retos, espero vencerla sin muchas dificultades (aunque con más de un pinchazo, seguro). Pues a lo dicho, hecho. Me voy al "gym" (que duro es esto de dejar kilos).(Ayer, vestido como deportista, quién me ha visto y quién me ve...)
Yo te quiero ver así vestido, jajaja
ResponderEliminarAnimo corazón que las agujetas se pasan.
Pues yo me estoy rascando el mismísimo a más no poder antes de mi retorno a Málaga que será casi ya. Y a mí me pueden amenazar de muerte, mandarme mercenarios, hacerme cosquillas en los pies sin parar que no voy a un gimnasio ni loca XD. Prefiero la dieta de un yogurt de cena y pasarlo mal así. ¿Pero deporte? XDDDDDDDD
ResponderEliminarBueno Noooorl, echo algo de menos el ambientillo de la redacción (quitando los breves XD), pero todo retorna a sus orígenes y yo he de volver a la misión que se me encomendó.
Pues eso, saludos por allí y muchas gracias a tí y a Caro por haber sido mis jedais estos meses :DDD.
Tu becaria la friki y tralará.
(Pásate por mi blog un día de estos, que no hace daño XD)