jueves, 30 de abril de 2009

El ataque de los clones

Más de una vez me habían llamado como él. Llegué, lo reconozco, a odiarlo porque mi variopinto nombre tenía ya a alguien como valedor y yo era un plato segundón. Lo conocía de oidas. De ver alguna que otra foto por internet. De su amor por el flamenco. Pero nunca había coincidido con él. Hasta hoy. Foro Joly con Carmen Caffarel en el Gran Hotel. Tras cinco horas de pleno en Diputación, me he plantado en el susodicho hotel para seguir el evento de la prestigiosa directora del Instituto Cervantes, y allí estaba. Norberto Torres. Tremendo. Francés, muy callado. Regordete, comilón, como yo. Gafas extravagantes y sonrisa fácil. Idem. Pelo a lo afro y palmo y medio del suelo. Me he sentido grande, reconfortado. Los clones de nombre, y de espíritu, por fin tuvieron su merecido encuentro.

Objetivo cumplido.

Así soy yo...

1 comentario:

  1. Pero que fuerte!!! jajaja
    Que haces con mi profesor de frances???

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